El firmamento se manifiesta en toda vivencia, pero puede ser reconocido o no por el ser humano.
Cuando nos afianzamos en nuestra propia y bella Realidad, alcanzamos el Logo, y con ello, la Sabiduría Espiritual.
Mientras formamos parte del plano físico y quien realmente ha reconocido su Grandeza, ha de mostrarlo en todo momento, con su bella actitud.
Si nos involucramos en desatinos, perderemos un tiempo precioso, de ser esa bella Perla que en realidad Somos.
Las huestes humanos dejan improntas de lucha, pero si has alcanzado ese espacio infinito que vive en ti y ese reconocimiento de la Verdad, has de comprender tanto al que vence como al vencido. Porque cada uno lleva su camino y su trazado.
Todos somos vibración. Pero ella, difiere, dependiendo de nuestras vivencias, pensamientos y sentimientos.
El pensamiento ejerce una directa influencia sobre el sentimiento y el sentimiento sobre la palabra.
Por ello, hamos de cuidar nuestros pensamientos, ya que todo ello, cobra vida, y ejerce poder con nosotros mismos y sobre todo, con las vivencias y actitudes de los seres que habitan en la evolución.
